8 sept 2020

EL DESCANSO SABÁTICO - De la creación a Cristo

El descanso sabático 

Dios … reposó de toda la obra que había hecho en la creación. Génesis 2:3

¿Cuál fue la corona de la creación de Dios? No fue la creación del hombre sino la provisión del sabbat; no fue la comisión dada al ser humano de que tome las herramientas y trabaje durante seis días sino el mandato de que en el séptimo día las deje a un lado y adore al Creador. El plan de Dios no consistía solamente en la creación del homo faber (el hombre trabajador) sino en la creación del homo adorans (el hombre adorador). Porque la condición más noble en la que puede encontrarse el ser humano es cuando adora a Dios.
Este propósito de Dios quedó luego grabado en el Decálogo, cuyo cuarto mandamiento expresa: ‘Acuérdate del día de reposo para santificarlo’, es decir, sepáralo de los demás días tanto para descansar como para adorar (Éxodo 20:8). Dios sabía lo que hacía cuando proveyó para el descanso de nuestra mente y nuestro cuerpo. Se han hecho varios intentos de modificar el ritmo divino de un día cada siete. Los revolucionarios franceses elaboraron un calendario republicano con semanas de diez días, pero en 1805 Napoleón restableció la semana de siete días. Después fueron los revolucionarios rusos quienes convirtieron el domingo en un día laboral, pero eso no duró mucho. Stalin restableció el domingo como día de descanso. Dios es más sabio.

Además, separó un día de cada siete con el propósito de que lo dedicáramos a la adoración. Aunque algunos cristianos insisten en separar el séptimo día, al parecer los primeros seguidores de Jesús eligieron adorar en el primer día de la semana, para celebrar así la resurrección de Jesucristo (Juan 20:19, 26; Hechos 20:7). Por otro lado, lo fundamental no es cuál día de la semana se separa sino que se mantenga el ritmo de un día cada siete.

Jesús observó el sabbat y enseñó a sus discípulos a hacerlo, pero también estableció un principio importante: ‘El día de reposo fue hecho por causa del hombre, y no el hombre por causa del día de reposo’ (Marcos 2:27). Guardar el domingo no debe ser una práctica pesada y restrictiva sino una celebración semanal gozosa en la que destinamos tiempo a descansar, a adorar y a compartir con la familia.

Para continuar leyendo: Deuteronomio 5:12–15

Stott, J. (2013). Toda la Biblia en un año: Reflexiones diarias Desde Génesis hasta Apocalipsis